El oráculo de hoy nos va a responder
¿Cómo puedo desarrollar la compasión?
Debes escoger entre la flor rosada, la flor naranja y la flor amarilla.
¿Cómo puedo desarrollar la compasión?
Debes escoger entre la flor rosada, la flor naranja y la flor amarilla.
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¿Cómo puedo desarrollar la compasión?
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¿Cómo puedo desarrollar la compasión?
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Si escogiste la flor rosada:
La manera en que puedes desarrollar la compasión es teniéndola contigo misma, contigo mismo, en primerísimo lugar. Para todos tienes tiempo, para todos tienes una palabra de aliento, a todos los comprendes, menos a ti.
Consejo:
Que la compasión parta por casa como dice el dicho popular. ¿Te cuidas cuando te sientes enferma o con malestares y todo te desvives por los demás? ¿Escuchas tu cuerpo, tus emociones, o te dejas en último lugar? Comienza por desarrollar la compasión en ti: descansa, aliméntate bien, aprende a decir que no, respeta tu tiempo de descanso, tu tiempo de divertirte. Una vez que lo logres, la compasión hacia el otro llegará sin esfuerzo y sin darte cuenta.
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Si escogiste la flor naranja:
Una bella forma en que podrías desarrollar la compasión sería que dejaras de juzgar a los otros, dejar de decir que son inconscientes, que no entiendes cómo hacen esto o esto otro, que hasta cuando la gente dice o hace tal cosa, porque cuando intentas ser compasivo o compasiva, el sentimiento no es 100% real porque nace de la cabeza y no del corazón.
Consejo:
Si quieres ser compasiva o compasivo, debes intentar ponerte en los zapatos del otro por mínimo una semana. La gente no actúa de ciertas maneras porque es tonta o torpe; siempre hay una razón detrás, y la compasión te ayudará a verla. Puede ser un dolor del pasado o una herida reciente. Lo que sea es válido y sólo el ponerte en los zapatos del otro te ayudará a entenderlo y hablar desde ahí.
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Si escogiste la flor amarilla:
Lo que te ocurre es que confundes la pena con la compasión, y esa poca claridad hace que en vez de ayudar, le hagas un flaco favor a las personas. Sentir pena o tristeza por alguien te hace ocupar un lugar más alto energéticamente hablando, porque miras al otro desde arriba, desde tu lugar privilegiado. La compasión, por otro lado, hace que te pongas en los zapatos del otro, y desde esa mirada, comprender y ayudar, desde su historia, desde sus dolores, desde su vida y sus experiencias.
Consejo:
Deja de decir "pobrecito" frente a alguien, deja de mirar al otro como una persona desvalida y triste. Conéctate con su historia, con sus porqués más profundos, y desde ahí vive la compasión.
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Claudia Campos Canifrú.
Maestra de Tarot.
+569 8 5683589
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