"Ahora retrocedamos un poco para saber cómo descubrieron los científicos el universo cuántico, lo que sucedió cuando empezaron a estudiar el mundo subatómico. Se dieron cuenta de que los átomos, las piezas que conforman el universo físico, están formados de un núcleo rodeado de un gran campo electromagnético que contiene uno o más electrones. Este campo es tan grande en comparación con los minúsculos electrones que parece estar vacío en un 99,999999999999 por ciento (doce "nueves" luego de la coma) Sin embargo, como acabas de leer, todo ese espacio no está vacío en realidad, sino ocupado por un enorme despliegue de frecuencias energéticas que conforman un campo de información invisible e interconectada. Así pues, pese a su apariencia sólida, el universo tal como lo conocemos es en realidad energía e información en un 99,999999999999. De hecho, la mayor parte del universo está constituido por este espacio "vacío"; la materia es un componente infinitesimal en comparación con la inmensa nada física".
"En lo que a ti concierne, todo ello implica lo siguiente: si contemplas tu vida día tras día desde el mismo nivel mental, previendo el futuro a partir del pasado, estás plasmando infinitos campos de energía en patrones de información, siempre los mismos, que conoces como tu vida. Por ejemplo, si te despiertas y piensas: ¿Siento dolor?, ese dolor que siempre te acompaña pronto se manifestará, porque así lo esperabas.
Imagina lo que pasaría si fueras capaz de dejar de prestar atención al mundo físico y al entorno. Como decíamos en el capítulo anterior, cuando desvías la atención de tu cuerpo te conviertes en un ser sin materia y ya no tienes acceso a los sentidos (ni manera de usarlos). Cuando desvías la atención de las personas que conoces te conviertes en nadie, así dejas de poseer una identidad de madre, padre, pareja, hermano, hermana, amigo, amiga, etc. ya no tienes profesión, ni religión, ni tendencias políticas, ni nacionalidad. Careces de raza, género, orientación sexual o edad. Cuando retiras la atención de los objetos y los lugares que pertenecen al plano físico, devienes nada en ninguna parte. y, por fin, si retiras la atención del tiempo lineal (definido por un pasado y un futuro), sales del tiempo; es decir, habitas el momento presente, donde existen todas las posibilidades del campo cuántico. Como ya no te identificas ni estás conectada/o con el mundo físico, ya no intentas influir en la materia a través de la materia; trasciendes el mundo físico y tu propia identificación como cuerpo ubicado en el espacio y en el tiempo. En un sentido muy real, te encuentras en la oscura inmensidad del campo unificado, donde nada material tiene cabida. Ese es el efecto más inmediato de meditar con asiduidad para acceder al momento presente que describía en el capítulo anterior".
" ... Resumiendo, si te concentras en lo que ya conoces, obtendrás más de lo mismo. En cambio, si te fijas en lo desconocido, creas posibilidad. Cuanto más te detengas en el campo de infinitas posibilidades en tanto que consciencia -consciente de estar presente en esa oscuridad sin fin- sin prestar atención a tu cuerpo, a los objetos, a las personas, a los lugares y al tiempo, más energía invertirás en lo imprevisible y más posibilidades tendrás de crear nuevas experiencias en tu vida. Es una ley.
Extracto del libro "Sobrenatural" del dr. Joe Dispenza.
Editorial Urano.