Si bien la concepción de “éxito” puede cambiar según cada individuo, la realidad
es que algunas personas sí lo alcanzan, mientras que otras no
¿Qué hacen los exitosos que los diferencia del resto?
Se ha escrito mucho sobre los requisitos para formar parte
de este reducido grupo, pero creo que cada uno de nosotros
ya sabe las cosas que se necesitan para mejorar en el área deseada.
Un tipo de personas exitosas son los viajeros frecuentes. Los viajes nos inspiran y nos educan de manera que permiten construir nuestro carácter y desarrollar nuestras habilidades de manera natural. Los viajeros frecuentes aprenden estas habilidades y, por esta razón, es más probable que sean exitosos. Si no me crees, a continuación te dejo 15 razones que lo confirman:
1. Prosperan fuera de su zona de comodidad
Los viajeros frecuentes se encuentran regularmente en situaciones desconocidas, las cuales deben superar para prosperar. Al enfrentarse a numerosas experiencias nuevas, aprenden valiosas estrategias de adaptación que los ayudan a lidiar con la incertidumbre, a mantenerse calmados y a aplicar soluciones efectivas. Esta es una habilidad clave para el éxito, tanto en los negocios como para lidiar con las personas.
2. Le dan la bienvenida a los desafíos
Los viajeros están abiertos a todo. Las personas que están constantemente rodeados de cosas nuevas y diferentes, evitan el aburrimiento y aprenden a enfocarse mejor. Esta manera de pensar inspira la innovación y la creatividad.
3. Saben manejar sus emociones
Los viajeros frecuentes experimentan distintos niveles de estrés al tener largas escalas en aeropuertos, tediosas interrogaciones de guardias fronterizos y respuestas mal educadas del personal del hostal, entre otras cosas. Todo esto puede ocasionar que nuestros nervios queden de punta. Pero al desarrollar un agudo sentido de su conciencia, ellos perfeccionan la habilidad de manejar sus emociones y mantenerse calmados bajo presión. Ser conscientes de nosotros mismos incrementa la productividad y ayuda a las personas a encontrar lo que los hace felices en sus vidas.
4. No necesitan tener todo bajo control
Los viajeros tienen que confiar en personas que no conocen todo el tiempo. Lidian con las barreras lingüísticas, los taxistas en ciudades extrañas y suelen depender de la amabilidad de desconocidos.Aceptar el hecho de que no pueden tener todo bajo control, los ayuda a construir nuevas relaciones. Lo anterior les ayuda a desarrollar confianza en sus propias habilidades al escoger amigos genuinos y confiables.
5. Controlan el miedo y actúan a pesar de él
La clave para el éxito es tomar acción. Cuando viajas mucho, te pones en situaciones en las que no existe un punto de retorno. Esto hace que las personas enfrenten sus miedos, desarrollando habilidades para dominarlo y actuar a pesar de él.
6. Reconocen y toman las oportunidades
Los viajeros tienen más experiencias y conocimientos del mundo. Ellos aprenden maneras nuevas y mejores de hacer las cosas al estar expuestos a costumbres y culturas diferentes. Tal conocimiento los ayuda a identificar las oportunidades para mejorar e innovar, tanto en sus hogares como en los lugares que visitan.
7. Saben negociar y obtener lo que quieren
Así evitan que se aprovechen de ellos. Las buenas habilidades para negociar son necesarias para obtener lo que quieres o deseas, sin ser mal educado o agresivo. Esto es realmente importante para ayudar a los otros a entender y aceptar tus ideas, tanto en los negocios como en la vida.
8. Ven la belleza donde la mayoría no la ve.
Ellos ven muchas cosas diferentes y entrenan sus cerebros para enfocarse en lo que es hermoso. La novedad constante mantiene los ojos y la mente en alerta. Las personas que viajan ven la belleza donde el resto sólo ve cosas ordinarias. Esta habilidad les pertenece a los grandes fotógrafos y a los escritores poéticos, también sirve como fertilizante del jardín donde crece la inspiración.
9. Confían en sí mismos
Las personas que viajan mucho aprenden a confiar en sí mismos y creen que pueden lograr cualquier cosa que deseen. Esto los ayuda a ser persistentes ante los obstáculos y a recuperarse mejor de los fracasos.
10. Entienden mejor las diferencias entre las personas y son más tolerantes
Los viajeros siempre están conociendo gente nueva. Se vuelven buenos para interrogar y aprender sobre las personas y sus opiniones. Las preguntas salen de forma natural debido a la gran curiosidad que tienen y a su deseo de conocer sobre los lugares que visitan. Todo esto lleva a grandes conversaciones que los ayudarán a entender y aceptar otras perspectivas. Hacen amigos con facilidad y muchos los quieren a causa de ello.
11. Saben vivir en el momento
Aprender a vivir en el momento presenta muchos beneficios mentales y físicos. Los viajeros frecuentes saben que el tiempo que pasan en un lugar avanza muy rápido. Esto los ayuda a vivir en el momento más que al promedio de las personas.
12. Sonríen más y se sienten felices más a menudo
Los estudios demuestran que viajar nos hace felices. Los viajeros frecuentes sonríen más que el promedio, porque exploran nuevos lugares con mayor regularidad. Se sienten felices porque tienen la oportunidad de conocer a personas diferentes, ver paisajes increíbles y comer delicioso. Esa habilidad de vivir en el momento contribuye a su felicidad.
13. Entienden la importancia de saber escuchar
Esta es una habilidad vital que le resulta muy difícil a las personas. Aprender a enfocarse y escuchar lo que nos dicen es importante para ser exitosos en nuestras vidas. Lograr el éxito depende de construir relaciones; y construirlas requiere entender a las personas. Los viajeros saben que necesitan escuchar a los otros para entenderlos bien.
14. Juzgan menos y sienten más empatía
Los viajeros frecuentes aprenden a mostrar empatía y a ser menos sentenciosos. La empatía resulta de una voluntad de entender, y las personas que viajan encuentran esa voluntad de manera natural. Los grandes líderes saben que entender al resto genera lealtad y ayuda a avanzar al negocio.
15. Saben ahorrar y gastar sabiamente
Los viajeros frecuentes saben en qué lugares su dinero servirá más. Al hacer que el mundo sea tu hogar, puedes escoger los lugares a los que vas dependiendo del costo de vida. Las personas que viajan y trabajan pueden ganar menos y vivir bien en muchos países.
Visto en LifeHack.
Imágenes de WeHearIt.