Necesitamos cuidar bien de nuestro pensar y sentir.
Hay que tener una actitud mental positiva ante nosotros mismos,
hacia los demás y hacia la vida en general.
Y sentirnos conectados espiritualmente.
Si realmente queremos una vida dichosa, deberemos tener pensamientos dichosos,
los cuales crearán emociones dichosas.
Tenemos que aprender a observar a las personas y a los hechos
sin que nuestro ego automáticamente cree un juicio de aprobación y conformidad
o bien de condena o repulsa.
A todos nos resulta tremendamente doloroso asumir nuestra responsabilidad total
en nuestra vida, nuestras circunstancias y situación de vida.
Y siempre tendemos a evadirnos de esa responsabilidad
y buscar la culpa en el exterior.
Dr. John Demartini.