El inconsciente colectivo es ese lugar donde habita el pensamiento humano.
Todas las formas de pensamiento de cada ser,
residen en el inconsciente colectivo reducido a “frecuencias de energía”.
Nuestra mente, no solo está influenciada por lo que representa nuestra historia particular de vida, sino también por toda la historia de la humanidad. Todas las formas de pensamiento se encuentran vivas, circulando en el ambiente general del planeta y tomarán forma, siempre que haya una mente afín a su frecuencia de energía.
En el inconsciente colectivo pueden residir los miedos más profundos creados a través de la historia de la humanidad, el horror de la guerra, el dolor de la enfermedad y la muerte, así como los ideales del amor y la abundancia. Cada idea puede conectar o no con la persona, esto depende si en el subconsciente de la persona hay alguna creencia que sea afín a este pensamiento colectivo, si es afín, será atraído a su realidad.
Podríamos imaginar que el inconsciente colectivo es un gran contenedor de historias y realidades infinitas y que nuestra capacidad de “descargar” alguna de esas realidades, reside en cada botón activo de nuestro subconsciente.
Por lo mismo, aún habitando el mismo mundo, podemos ver una increíble diversidad de formas de vida, incluso, habitando la misma casa y compartiendo una vida con tu pareja o familia, podrás ver que la realidad es diferente para cada uno.
Tomando en cuenta todo esto, el mecanismo de creación es sencillo: Extraerás del inconsciente colectivo la realidad que sea afín a la programación de tu subconsciente.
Si observamos la historia humana, podremos ver cómo pueden cambiar los tiempos, los escenarios de vida y los personajes de cada historia, sin embargo, seguimos recreando los mismos miedos y dramas de tiempo ancestral, por lo tanto, las guerras, las pérdidas, el miedo a la muerte, la carencia, la enfermedad, el temor a la soledad, la traición o el dolor, siguen rigiendo nuestra existencia sin importar el tiempo, lugar, año, clase social o rol que desempeñemos.
En el inconsciente colectivo reside tanto lo positivo como lo negativo, toda la gama de pensamientos traducida a frecuencias de energía, habitan en el, toda la historia humana así como cada una de las intenciones humanas del día de hoy, planes, proyectos, sueños y deseos, están ahí.
Un proceso de creación, desde este punto de vista, puede seguir pasos sencillos como el que te describo a continuación:
Imagina que tienes el deseo de viajar a “x” parte del mundo. Tu deseo viaja a nivel de frecuencia de energía al inconsciente colectivo y se instala ahí como “una idea”. Esta idea, no queda inmóvil, buscará dentro del mar del inconsciente colectivo, ideas o frecuencias de energías que resuenen con ella. Imagina que en alguna parte del mundo, crean una oferta para hacer un hermoso tour al lugar que deseas viajar, esta otra “idea” habita el inconsciente colectivo también y encuentra afinidad con tu idea, tu deseo de viajar, ambas se fusionan y en pocos días esta fusión se materializa, será cuando recibas un e-mail con la oferta para el viaje. La oferta es tentadora pero no tienes el dinero aún para comprarla, así que tu deseo/idea toma un nuevo matiz y una nueva frecuencia y ahora vibra con la llegada del dinero para concretar tu deseo, de nuevo viaja al inconsciente colectivo y busca ahí una idea afín para coincidir.
Un amigo que hacía tiempo te debía dinero, recibe un bono extra en su trabajo y sin tener la intención “salta a su mente” el recuerdo del dinero que te debía, así que toma la decisión de llamarte por teléfono para decirte ahora puede pagarte esa viaje deuda… coincidentemente, este dinero resulta ser justo la suma que requieres para comprar tu tour. Muchas veces, a este tipo de procesos, les llamamos SINCRONÍAS.
Este sistema de creación pudo completarse fácilmente, en poco tiempo y sin esfuerzo gracias a que no hubo ningún patrón de creencia en el subconsciente que INTERFIRIERA con su creación. Si en este ejemplo, la persona hubiera tenido algún patrón de creencia que vibrara en la culpa o el miedo a no generar el dinero, la creación se habría retrasado o se hubiera desvanecido en su totalidad.
Para lograr este tipo de creación, no hace falta tener este conocimiento, muchas personas pueden crear este tipo de realidad sin saber la mecánica, lo traen integrado a sus sistema, otras personas tendrán que ser conscientes de la mecánica para hacer que este sistema siempre fluya libremente, siendo conscientes de la importancia de centrarnos en este poder espiritual, y la importancia de observar las grabaciones del subconsciente.
Extraído del Curso de "Cruzando el Portal"
Harumi Puertos.
Sitio web: www.rutasdelalma.com
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