-Sé que este exceso no es bueno para la salud, ni tampoco es estético…- sollozaba la grasa acumulada en el abdomen de un señor. La misma queja que días anteriores habían expresado los “michelines” y cartucheras de su compañer@s de una terapia para obes@s. Todos ellos demandaban la respuesta a una sola pregunta:
-¿Tenemos alguna utilidad?
Oyeron del terapeuta algo que les resonó:
-La dieta alimentaria y el ejercicio físico son indispensables para lograr el peso adecuado, pero igualmente lo es el darse cuenta de que vuestra obesidad, como cada síntoma que el sabio cuerpo “fabrica”, tiene una función sanadora. Lo que no se resuelve en el plano psíquico, el cuerpo lo intenta resolver en el plano somático. Una capa de grasa puede ocultar un deseo secreto relacionado con la zona en la que se instaura, puede transformar nuestro cuerpo en el de un bebé y así lograr el amor y la atención que nos falta, puede servir para escondernos y además y puede también valer de escudo protector para que no nos hieran. Pasemos a la acción, resolver estos conflictos nos ayudará a transformar esa grasa en una poderosa energía vital….
Plano Creativo.
