martes, 1 de marzo de 2011

¿Era El Miedo Lo Que Se Escondía Detrás De Su Lumbago?


Fueron sus vértebras lumbares las que le dijeron que el miedo las agarrotaba más que todas las hernias discales, los problemas articulares y los problemas de columna juntos.

Tuvo que responderse: ¿Miedo a qué?.

Tal vez un rechazo inconsciente a los cambios que la vida le planteaba. Al cambiar de hábitos abandonaría la zona segura para entrar en lo desconocido. ¡Ahí estaba la clave!.

Las vértebras añadieron: “Nos bloqueamos cuando percibimos señales de que no vas a poder hacer frente a todas tus responsabilidades, y que lo que en verdad te gustaría es salir corriendo”.

Quedaba claro que el mejor remedio no serían las pastillas, sino la flexibilidad. Dejar de querer controlarlo todo, confiar en lo nuevo y aceptar cualquier ayuda que viniera del exterior. En ese instante la sangre -la vida- volvería a oxigenar la zona del conflicto y el lumbago desaparecería sin dejar rastro.

Imagen: www.flickr.com/lahatom / www.tomlahat.com