“La primera excusa que tienes es que cambiar de opinión te obliga
a reconsiderar tus sistemas de defensa y esto es muy complicado.
Es útil saber previamente que el cerebro lo que busca no es la verdad,
que esto es muy complicado y te obligaría a estar cambiando de escenario
y de opinión constantemente.
No, el cerebro lo único que tiene que hacer es garantizar tu supervivencia,
es lo que él quiere, que no te des un golpe de cabeza contra la pared.
Y si cambias de opinión,
tiene que reconsiderar toda la estrategia defensiva.”
Eduardo Punset.
