“Tener un cuerpo no significa cargar un buey alrededor del alma.
El cuerpo es magnífico, ya que ha sido digno de ser habitado por un Dios.
Lleva en si a un Dios. Es un templo.
Mientras no lo vivamos como un templo, no lo viviremos en absoluto.
Vivir nuestro cuerpo como un templo quiere decir limpiarlo por entero
para que el alma se pueda desarrollar
y el Dios interior pueda habitarlo y hablar.”
Alejandro Jodorowsky, en “Evangelios para Sanar“.
Imagen: Masha Sardari.