martes, 12 de abril de 2011

Decálogo Antidecepciones.


Dos viajeros se encaminaban a un destino muy deseado. El trayecto fue largo, a veces feliz, a veces cansado, con tramos cuesta arriba y tramos cuesta abajo, pero juntos y con paciencia seguían adelante… Cuando faltaban pocos metros para alcázar la meta, encontraron un cartel en el que leyeron:

“Camino temporalmente cortado”

Se sintieron sorprendidos, desconcertados, frustrados, abatidos… pero de pronto se abrazaron y recordaron algo que un maestro les enseñó: “el decálogo antidecepciones”:

1.- No hay un solo sendero para llegar a la montaña, por muy seguro que estés de que el camino elegido es el mejor, no descartes otras posibilidades. Agudiza el ingenio para descubrirlas.

2.- Conserva la esperanza. Puede que el último minuto contenga una sorpresa.

3.- El hecho que hoy maldices, mañana puede que lo bendigas. Cada episodio de vida es como un chiste, ¡no lo entiendes hasta el final!

4.- Analiza las resistencias internas y los obstáculos externos que se interponen entre tú y tu deseo. Resuelve lo posible y acepta lo imposible.

5.- Si tu deseo no llega, vive como si ya estuviese cumplido, visualízalo, hazle un hueco en tu quehacer diario, imita la emoción de haberlo conseguido y atraerás la experiencia del logro.

6.- No tengas prisa, haz lo que puedas y confía en lo que un guionista amoroso y sabio tiene preparado para ti.

7.- Conecta y acepta tu emoción de frustración pero no te identifiques con ella.

8.- Aprende a ver en la decepción algo bello: detrás de ella está un hermoso y bienintencionado deseo al que no tienes por qué renunciar.

9.- No vivas la experiencia en soledad. Aprende a expresarte, a compartir y a recibir.

10.-Y si estás confundido y triste tras una experiencia frustrante, recréala en un cuentín.

Y los viajero sacaron su cuaderno de cuentos y se pusieron a escribir…
Al cabo de un tiempo miraron al horizonte y vieron un camino totalmente despejado. El cartel había desaparecido.

Plano Creativo.