La atención consciente sostenida corta el lazo entre el cuerpo del dolor y sus procesos de pensamiento y efectúa el proceso de la transmutación. Es como si el dolor se volviera combustible para la llama de su conciencia, que por consiguiente arderá con más brillo. Ese es el significado esotérico del antiguo arte de la alquimia: la transmutación de un metal bajo en oro, del sufrimiento en conciencia. La ruptura interior es curada y usted vuelve a ser completo. Su responsabilidad entonces es no crear más dolor.
Permítame resumir el proceso:
Enfoque la atención en el sentimiento que hay dentro de usted.
Reconozca que es el cuerpo del dolor.
Acepte que está allí.
No piense en él, no deje que el sentimiento se transforme en pensamiento.
No juzgue o analice.
No se identifique.
Permanezca presente y continúe siendo el observador de lo que está ocurriendo dentro de usted. Vuélvase consciente, no sólo del dolor emocional sino también de "el que observa", el observador silencioso. Ese es El poder del Ahora, el poder de su propia presencia consciente. Vea entonces lo que ocurre.
Eckhart Tolle.