miércoles, 1 de octubre de 2014

"Meditación Whirling".

El Whirling Sufi es una de las técnicas más antiguas, una de las más potentes;
 es tan profunda que incluso una sola experiencia puede cambiarte totalmente.
Gira como un trompo con los ojos abiertos -como los niños pequeños, que dan vueltas rápidamente-, como si tu ser interno se hubiese vuelto el centro y todo tu cuerpo una rueda que gira -la rueda de un alfarero, girando. Tu estás en el centro, pero todo el cuerpo está moviéndose.
Se recomienda no haber tomado ni comido en las tres horas previas al whirling. Si estás descalzo y con ropa suelta, mejor.
La meditación se divide en dos partes: girar y descansar.
No hay un tiempo establecido para girar -puedes seguir horas y horas -, pero se sugiere que sigas una hora por lo menos para que llegues a sentir totalmente el remolino de energía.
Se gira sobre el lugar, sin desplazarse, en el sentido contrario a las agujas del reloj, con el brazo derecho levantado con la palma hacia arriba y el brazo izquierdo suelto con la palma hacia abajo.
Los que se sientan incómodos girando en sentido contrario a las agujas del reloj, pueden cambiar de sentido. Mantén tu cuerpo relajado y los ojos abiertos, pero sin focalizar para que las imágenes sean borrosas y fluidas. Hazlo en silencio.
Durante los primeros 15 minutos, gira lentamente; después anda aumentando gradualmente la velocidad en los primeros 30 minutos hasta que el whirling te posea y te conviertas en un remolino de energía -la periferia es una tormenta en movimiento, pero el espectador sigue silencioso y quieto, en el centro.
Cuando gires tan rápido que no te puedas mantener parado, tu cuerpo se va a caer por sí solo, no hagas que la caída sea tu decisión, ni trates de acomodar la caída de antemano; si tu cuerpo está relajado, vas a aterrizar suavemente y la tierra va a absorber tu energía.
Una vez que te hayas caído, empieza la segunda parte de la meditación. Ponte boca abajo inmediatamente para que tu ombligo desnudo esté en contacto con la tierra. Si alguien siente un fuerte malestar en esta posición, tendría que ponerse de espaldas. Siente cómo se integra tu cuerpo con la tierra, como un bebé presionando el pecho de la madre. Manten los ojos cerrados y quédate pasivamente y en silencio por lo menos quince minutos.
Después de esta meditación quédate lo más inactivo y quieto que puedas.
Cierta gente puede sentir náuseas con esta meditación, pero esta sensación tiene que desaparecer en un par de días. Si persiste cambia a otra meditación.
Osho.