Una vida llena de actos de amor y buen carácter es el mejor recuerdo.
Aquellos a los que has inspirado y con quienes compartiste tu amor,
te recordarán cómo los hiciste sentir hasta mucho después de que ya no existas.
Así que talla tu nombre en los corazones y no en la piedra.
Lo que has hecho por ti muere contigo,
lo que has hecho por otros y el mundo,
permanece.
Desconozco autor.
Imagen: samsara.