martes, 18 de marzo de 2014

"Cuando Me Amé de Verdad".

Imagen de Rumi Quotes. 
Cuando hablamos del ego muchas son las interpretaciones: 
unos lo maldicen y otros lo enaltecen. 
El ego no es más que la imagen que tenemos de nosotros mismos, 
creado por el intelecto de acuerdo a nuestra experiencia. 
Es imposible no tenerlo; 
lo importante es saber que no se trata de nosotros, 
sino de una imagen.


Quererse y amarse a sí mismo no es egoísmo. 
Es aceptarnos como seres únicos. 

───────»♣ ☆ ♣ ☆ ♣«─────── 
 Este escrito de Charles Chaplin apunta a la libertad de ese ego:

Cuando me ame de verdad, 
comprendí que en cualquier circunstancia yo estaba en el lugar correcto 
y en el momento preciso. Y entonces, pude relajarme. 
Hoy se que eso tiene nombre…Autoestima.

Cuando me ame de verdad, 
pude percibir que mi angustia y mi sufrimiento emocional 
no son sino señales de qué voy contra mis propias verdades. 
Hoy sé que eso es…Autenticidad.

Cuando me ame de verdad, 
deje de desear que mi vida fuera diferente, 
y comencé a ver que todo lo que acontece contribuye a mi crecimiento. 
Hoy sé que eso se llama…Madurez.

Cuando me ame de verdad, 
comencé a comprender por qué es ofensivo tratar de forzar una situación 
o a una persona, solo para alcanzar aquello que deseo, 
aun sabiendo que no es el momento o que la persona
 (tal vez yo mismo) no está preparada. 
Hoy sé que el nombre de eso es…Respeto.

Cuando me ame de verdad, 
comencé a librarme de todo lo que no fuese saludable: 
personas y situaciones, y cualquier cosa que me empujara hacia abajo. 
Al principio, mi razón llamo egoísmo a esta actitud. 
Hoy sé que se llama…Amor hacia uno mismo.

Cuando me ame de verdad, 
deje de preocuparme por no tener tiempo libre y desistí de hacer grandes planes, 
abandone los mega proyectos a futuro. Hoy hago lo que encuentro correcto, 
lo que me gusta, cuando quiero y a mi propio ritmo. 
Hoy sé que eso es…Simplicidad.

Cuando me ame de verdad, 
desistí de querer tener siempre la razón y, con eso, erré muchas menos veces. 
Así descubrí la...Humildad.

Cuando me ame de verdad, 
comprendí que mi mente puede atormentarme y decepcionarme.
Pero cuando yo la pongo al servicio de mi corazón, es una valiosa aliada. 

Y esto es ¡saber vivir!.