Muchas veces no asumimos que estamos estresados,
entonces llegamos a ese punto en el que no podemos más,
nos hacemos conscientes de ello y logramos, de una u otra forma,
revertir los efectos de la presión que hemos puesto sobre nuestro cuerpo.
Sin embargo, muchas veces me parece que estamos tan concentradas/os en llegar a una cierta meta o seguir funcionando todos los días que nuestra mente bloquea los signos de advertencia. Para bien o para mal tu cuerpo comenzará a presentar síntomas de cualquier forma y aunque muchas veces te puede parecer que no es para alarmarse tanto, lo mejor sería prestarle atención e intentar detenerte, aunque sea por un momento.
Ya sabes, seguir durmiendo tan poco y estar rellenando tu taza de café durante todo el día no es una forma sana de vivir, independiente de lo que nuestros estándares nos digan.
1. Duermes mal
Te cuesta conciliar el sueño y cuando finalmente lo haces duermes un sueño poco profundo o plagado de sueños desagradables.
2. No importa cuánto duermas, te sientes cansada igual
Pareciera que no hay cantidad de horas suficientes en el universo para que tu cerebro y tu cuerpo descansen.
3. Te resfrías con facilidad
@mollysmom
Cuando estamos ante niveles altos de estrés nuestro sistema inmune sufre, lo que provoca que nos contagiemos incluso las enfermedades más comunes y fáciles de evitar.
4. Tienes dolores musculares
Especialmente en el cuello y en la espalda y son causados en general por la tensión acumulada en tu cuerpo y también por pasar sentadas trabajando tanto tiempo.
5. Estás constantemente preocupada/o
@angelicareyes_68
Si sientes que no puedes dejar de pensar en tu trabajo, en ese examen o en algo más que te preocupa, entonces es probable que estés más que sólo un poco estresada y debas considerar tomarte un descanso dentro de lo posible.
6. No logras manejar bien el estrés de la vida diaria
Incluso las cosas más pequeñas pueden enfurecerte y hacerte llorar, este es otro indicador que te dice que tu cuerpo ya no puede más.
7. Sientes constantes deseos de comer alimentos azucarados o comida basura
@mary_loves_summer
Cuando aumenta el estrés también aumentan los niveles de cortisol, la hormona del estrés, y dentro del cuerpo hay algo que nos hace tener más deseos de consumir alimentos ricos en azúcar y grasas.
8. Usualmente te duele el estómago
Si bien los dolores de estómago pueden ser un síntoma de diversas enfermedades, también es posible que los experimentes con mayor frecuencia en períodos de mucho estrés o nerviosismo ya que nuestro sistema digestivo es extremadamente sensible ante el estrés que se da en nuestro cuerpo.