El oráculo te responderá:
¿cómo dejo de tratarme tan mal?
Debes escoger entre la carta 1, la 2 o la 3.
¿cómo dejo de tratarme tan mal?
Debes escoger entre la carta 1, la 2 o la 3.
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¿Cómo dejo de tratarme tan mal?
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¿Cómo dejo de tratarme tan mal?
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Si escogiste la 1: Es muy importante que hagas consciente el pensamiento autodestructivo al que estás acostumbrada, acostumbrado. Pon atención cuando te mires al espejo y sólo vengan a tu mente pensamientos negativos; o incluso que ni te mires al espejo porque crees que no vale la pena. La única persona que tiene el poder de cambiar esa forma de pensar tan castradora hacia ti, eres tú mismo, tú misma. Por eso, la próxima vez que te digas que eres fea, gordo, tonta, que no vales nada, que para que lo vas a intentar si no te resulta, mira ese pensamiento, llénalo de amor, y deja de tratarte mal. Si no puedes hacerlo por ti mismo, busca ayuda de profesionales que te enseñen a amarte tal como eres.
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Si escogiste la 2: Para dejar de tratarte mal es hora de que dejes de culpar a los otros de tus dolores, penas, daños y heridas, porque si sigues por ese camino lo único que haces es darle poder a terceros y no hacerte cargo de tu vida, de tu propia felicidad. Debes tratar de perdonar, de soltar esas rabias y rencores, de limpiar los daños con amor, y dejar de decir que no puedes porque te han dañado tanto. Llegó la hora de ser bondadosa y bondadoso contigo, de soltar los rencores, dar paso al amor y la luz en tu corazón.
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Si escogiste la 3: Prométete que desde hoy dejarás de pensar que te falta algo, lo que sea: estudios, un hijo, una pareja, un mejor trabajo, menos kilos, llevarte mejor con alguien, perdonar eso que aún te duele, meditar más, comer sano, fumar menos, por poner unos ejemplos. Para dejar de tratarte mal, debes fijarte en lo que sí has logrado, ahí debe estar tu foco. Mira tu vida, valora todo lo que has hecho, no mires en menos nada. Una vez que lo logres, se habrá ido esa autoexigencia que no te hace bien, y darás paso a la autovaloración, que tanto te hace falta.