Esta etiqueta -la esquizofrenia- parece indicar que mientras una parte de mi mente está en la realidad la otra vive en un mundo de fantasía. El inconsciente ha tomado al asalto la parte consciente de tal manera que no distingo los límites entre ambos.
Dicen que se necesitan varias generaciones de ancestros neuróticos para dar forma a esta enfermedad. Que tal vez manifiesto lo que mi árbol genealógico no pudo, o no supo expresar de otra forma.
Y que un camino sanador -de los muchos posibles- consiste en transformar estas pesadillas que vivo a diario en algo útil para mi, usando mis alucinaciones en forma creativa y positiva…
Imagen: Evelisis